Transportar y viajar con iguanas.

Son varias las razones por las que algún día podríamos transportar a nuestra iguana a otro sitio: Por cambio de vivienda, por ir de vacaciones, por llevarla a otra casa para enseñarla, para llevarla a un sitio soleado, etc... También son muchos los medios en los que podríamos viajar: En coche, a pie, en bicicleta, en avión, etc... Sea cual sea el motivo y el medio en el cual viajemos, deberemos tener en cuenta:
  • Las necesidades de nuestra iguana (sobre todo de temperatura y ventilación).
  • La seguridad de nuestra iguana (de espacio, de no perderla, etc...).
  • El tiempo que va a durar el viaje.
  • Nuestra seguridad (la iguana nunca deberá ir suelta).
Teniendo en cuenta estos cuatro factores, elegiremos un medio para albergar temporalmente a nuestra iguana durante el viaje. Los medios más adecuados son:
  • Maletas para el transporte de perros y gatos: Este tipo de maletas son las más apropiadas para largos viajes. Las hay de varios tamaños, su ventilación es muy buena, son fáciles de transportar y de limpiar y además las podemos conseguir fácilmente y por un precio razonable. Sus desventajas son por una parte que suelen ser cuadradas (pensadas para perros y gatos) y no alargadas, de manera que la iguana permanecerá con la cola doblada durante todo el viaje. Y por otra parte que si el clima es frío, por la excesiva ventilación que poseen estas cajas, la temperatura interior es difícil de mantener, a no ser que mantengamos la temperatura del coche elevada.
  • Bolsas de deporte: Las bolsas de deporte son más apropiadas para trayectos cortos y sobre todo, cuando nos desplazamos a pie. Para iguanas bebés podemos utilizar las mochilas para las botas de fútbol. Una bolsa de deporte tiene la ventaja de acoplarse al cuerpo de la iguana (aunque la iguana sigue teniendo la cola doblada, pero como el trayecto es corto...), de no ser tan fría como el plástico y de ocupar poco espacio. Sin embargo la ventilación es muy mala (debemos procurar dejar abierta la cremallera unos cmts.) y son difíciles de limpiar. De hecho, las iguanas, o al menos la mía, tiene la fea costumbre de defecar en cuanto se la encierra en la bolsa.
  • Cajas de cartón: En cualquier comercio podemos encontrar cajas de cartón de muchos tamaños y formas. Como ventajas están, que con suerte podemos encontrar cajas alargadas (en armerías p.e.), que no pesan y que podemos regular la ventilación (añadiendo más o menos agujeros). No obstante, el cartón húmedo se reblandece, además coge olores y es imposible de limpiar. Utilizaremos estas cajas para trayectos medios y largos, e intentaremos tapar el suelo con toallas absorbentes para evitar que el cartón se humedezca en el caso de que la iguana defeque y pueda escapar.
  • Grandes "Tupperwares": En tiendas de menaje, tiendas de "todo a cien", etc... podemos encontrar grandes cajas de plástico con tapadera incluso con ruedas, que podemos hacer servir para transportar a nuestra iguana. Como ventajas destacamos la posibilidad de practicar agujeros a nuestro gusto (algunas ya vienen con la tapa agujereada), su fácil limpieza, su poco peso y su económico precio. No obstante, es muy difícil encontrarlas de forma alargada y son difícil de transportar ya que son planas y no disponen de ningún tipo de asa para llevar con una mano.
Pues bien una vez conocidos los medios más comunes para transportar a nuestra iguana, debemos tener en cuenta que antes, durante y después del viaje debemos prestar atención a:
  • Antes del viaje: El tiempo que hará mientras dure éste, en qué lugar irá situada la iguana, el tiempo que durará el viaje. Nos aprovisionaremos de todo lo necesario para que el tiempo (temperatura) no suponga un problema para nuestra iguana. Si el trayecto es muy largo, procuraremos depositar en el interior del recipiente verduras o frutas ricas en agua (aunque con el stress, seguramente la iguana no coma...). Intenta que allá donde la lleves existan unas condiciones adecuadas para ella. Es una buena idea llevar con nosotros un botiquín de primeros auxilios por si acaso y también un termómetro para controlar la temperatura del receptáculo.
  • Durante el viaje: Procuraremos regular la temperatura y la ventilación del terrario dependiendo del clima. Nunca dejaremos el coche al Sol. Limpiaremos el recipiente en caso de necesitarlo, y sacaremos la iguana de éste cada dos horas para que se estire y sepa que "estamos con ella". Si el viaje dura más de un día, procuraremos llevar alimentos que sepamos que le gustan mucho. No debemos sacar a la iguana mientras se conduce, cualquier descuido podría causar un serio accidente.
  • Después del viaje: Tras un largo viaje, es más que probable que tanto tú como tu iguana estéis cansados. Proporciónale pues, un baño relajante de agua tibia (que la relajará y limpiará a la vez) y sitúala en un lugar tranquilo,con unas condiciones apropiadas de temperatura, luz, humedad y ventilación. Ah! Y dale de comer aquello que tanto le gusta, se lo merece.
Conclusión: Las iguanas no se adaptan con facilidad a los cambios. Intentaremos pues hacer que el viaje no suponga para ella una gran dosis de stress. Prestándole atención cuando lo requiera e intentando no dejarla nunca sola por lo que pueda ocurrir. Además, es importante que allá donde llevemos a nuestra iguana, existan unas condiciones adecuadas para mantenerla.

Parte de la información contenida en este apartado a sido extraída y traducida con permiso de la página web www.greenigsociety.org"