Distocia: Problemas de retención de huevos.

Si todo funciona correctamente, una iguana depositará los huevos uno por uno (de 25 a 50) hasta que ya no le quede ninguno en su interior. Los huevos deberían eclosionar (si estan fertilizados) a los tres meses (90 días).

En el apartado de incubación, podréis encontrar todo lo relativo a la incubación de los huevos.
No obstante, existen algunas patologías que pueden afectar negativamente a nuestras iguanas, e impedir una puesta normal de los huevos. Las causos más comunes que llevan a las iguanas cautivas a padecer estas patologías són:
  • Malnutrición.
  • Osteopatía metabólica (MBD).
  • No disponer de un lugar adecuado donde desovar.
  • Condiciones ambientales inadecuadas.
  • Huevos escesivamente grandes, deformados o rotos.
  • Fecalomas o cuerpos extraños en el colon y el recto.
  • Neoplasias o granulomas intra o extraluminales.
  • Estrechamiento de la pelvis debido a fracturas o anomalías en el desarrollo.
  • Salpinguitis (inflamación del oviducto).
Las más comunes són: ESTASIS FOLICULAR y la RETENCIÓN DE HUEVOS.

ESTASIS FOLICULAR (distocia preovulatoria): Como ya he explicado, con la llegada de la estación reproductiva, en los ovarios de las hembras que están sanas y en buena condición corporal (poseen "cuerpos grasos") comienza la maduración de los folículos. Esta maduración consiste, fundamentalmente, en un aumento del tamaño de los óvulos debido a la incorporación del vitelo (la yema) a su citoplasma. Se pasa así de un folículo inmaduro de unos cuantos milímetros de diámetro a un folículo maduro de varios centímetros. Al completarse la maduración del folículo se produce la ovulación, pasando éste al oviducto. En caso de realizarse la cópula es en el oviducto donde se produce la fecundación y donde el huevo adquiere sus cubiertas protectoras (membrana previtelina, albúmina, cáscara y cutícula). El ciclo se cierra con la puesta de los huevos. En el caso de los reptiles, las puestas suelen ser múltiples. De este modo el ciclo reproductivo de las iguanas y de todos los reptiles en general, podría resumirse del siguiente modo: Desarrollo folicular, ovulación, fecundación, formacióin de los huevos y puesta.

Pero desgraciadamente, no siempre los acontecimientos transcurren de este modo, ya que en cautividad son frecuentes las distocias. Se define la distocia como la puesta o el parto laborioso o difícil. En iguanas y en general, en todos los reptiles, las dos distocias más frecuentes son: la estasis folicular y la retención de huevos.

En medicina, el término estasis significa detención, retención, estancamiento de materiales líquidos o sólidos en un conducto orgánico. En la estasis folicular los folículos se desarrollan en el ovario pero, por motivos que se desconocen, la ovulación no llega a producirse. De este modo, los folículos continúan aumentando de tamaño en los ovarios, pudiendo llegar a fusionarse entre sí. El riesgo de que se rompan es grande, con lo que se vertería vitelo en la cavidad celómica y se produciría celomitis (algo parecido a la peritonitis de los mamíferos) y la muerte de la hembra en breve plazo. Aunque se ha citado la posibilidad de que los folículos estásicos pueden reabsorverse en los ovarios, hasta la fecha los autores especialistas en el género, no han encontrado ningún caso.

RETENCIÓN DE HUEVOS (distocia posovulatoria): Aquí se se produce ovulación. Los óvulos pasan al oviducto adquieren todas o alguna de las cubiertas protectoras pero, por diferentes motivos, no se produce la puesta. Los huevos estancados en el oviducto crean un problema mecánico por compresión de las vísceras vecinas : dificultan el retorno venoso al corazón (apareciendo ascitis o líquido en el abdomen), ocluyen la luz intestinal, no permitiendo la ingesta de alimento, son causa de disnea (respiración difícil),la rotura de alguno de los huevos puede provocar una seria infección, etc... Si no se actua el desenlace es idéntico al de la estasis folicular: la muerte de la hembra.

Como veis, lo más razonable es hacerle una visita a nuestro veterinario cuando tengamos la más mínima sospecha de que nuestra iguana pueda estar grávida. El veterinario, mediante radiografías, deberá ser capaz (si es especilizado en reptiles), de determinar si la gravidez se está llevando a cabo correctamente o no. Normalmente, en una radiografía tomada 4 semanas a partir de la fecha en la que la iguana grávida dejó de comer, deberían aparecer ya los huevos formados y en estado de calcificación. De no ser así (en el caso de que en los ovarios existieran todavía folículos), podría decirse casi con exactitud de que se trata de un caso de estasis folicular. Más adelante, si observamos que tras los 85-95 días de gestación, la iguana no presenta síntomas de querer desovar, o lo intenta pero no puede, deberemos de llevarla de nuevo al veterinario para intentar llevar a cabo el siguiente tratamiento médico:
  • Mantener a la iguana a una temperatura constante de 28-30ºC.
  • Si está en mal estado hay que estabilizarla mediante la administración de fluídos y suplementos vitamínicos.
  • Si está en buen estado hay que administrarle calcio vía intramuscular durante tres días y seis horas después de la última inyección, provocar el parto mediante la inyección de oxitocina vía intramuscular. (Nota: en condiciones normales la puesta debe completarse en un par de horas. Es importante tener presente que nunca hay que inyectar oxitocina a las primeras de cambio ya que conlleva riesgos tales como desgarros en la pared del oviducto, prolapsos de oviducto, etc...). Los resultados de todos modos no siempre suelen ser positivos.
La cirugía únicamente debe de realizarse tras un correcto diagnóstico de estasis folicular y en el caso de una retención de huevos que no responde al tratamiento médico. Antes de cualquier intervención siempre debe extraerse sangre y hacer unas pruebas mínimas para conocer el estado del paciente. Es aconsejable realizar un hemograma y valorar las funciones renal y hepática. Es conveniente administrar antibióticos antes de la cirugía de mánera profiláctica. A la hora de practicar la incisión ventral (doble o no) hay que prestar mucha atención a la vena media ventral que discurre por la línea media del abdomen (en caso de cortarla basta con ligarla, ya que se establecen circulaciónes colaterales).

En el caso de retención de huevos se extirpan ovarios y oviducto, y en el caso de estasis folicular con la extirpación de los ovarios ya basta. Tras comprovar que no hay hemorragias se procede a cerrar la incisión cutánea. Si el tamaño de la iguana lo permite, lo ideal es suturar la capa muscular y la piel de forma independiente. Debido a la presencia de las escamas, en los reptiles la piel debe suturarse siguiendo siguiendo un patrón de eversión: los labios de la incisión no quedan encarados si no que sobresalen del contorno corporal. Los puntos se quitan al cobo de 30 días.

Es conveniente hacer un vendaje compresivo y acolchado para proteger la herida y reducir la inflamación, que ser resará cada 7 días. En el terrario deben retirarse las ramas y elementos que puedan causar la caída accidental o el enganche del vendaje. El sustrato deverá ser de papel de periódico atóxico y cartón y se cambiará a diario. Deben de retirarse los recipientes con agua, puesto que el vendaje se mojaría, la herida maceraría y los puntos de sutura acabarían por soltarse.

Después de la intervención hay que administar antibióticos durante 10 días y analgésicos durante 3-5 días (muy importante, ya que el dolor que pueda sufrir un reptil suele minusvalorarse). Dado que tras la operación, las iguanas suelen dejar de comer durante 2 - 3 días, debemos aportarle una alimentación rica en agua, vitaminas y nutrientes.